La receta de este bizcocho de ayuno, como su nombre indica, es apta para el ayuno, pero por supuesto puede ser utilizada por todos. La receta es bastante económica en esencia, pero tenía algunas nueces y frutos secos que decidí agregar para darle sabor. Si no tiene nueces ni frutas secas, puede omitirlas con seguridad. En este caso he utilizado mermelada de piel de naranja y mermelada de guindas porque tenía, pero podéis utilizar cualquier mermelada que tengáis. Quedará maravilloso con trozos de peras, melocotones, membrillos, pero también con una deliciosa mermelada. No agregué canela aquí, pero creo que una cucharadita estaría bien.
Productos
la taza de té tiene una capacidad de 200 ml.
1 cucharadita agua tibia
1 cucharadita azúcar
3 cucharadas café expreso o café preparado
2 cucharadas jugo de limón recién exprimido
80 ml de aceite
1 pizca de sal
10 g de levadura en polvo
3 cucharadas cacao
2 cucharaditas harina
vainilla
1/2 cucharadita nueces y frutos secos finamente picados (yo usé una mezcla, pero puedes omitirlos por completo o solo usar nueces)
2 cucharadas mermelada de piel de naranja
3 cucharadas mermelada de cerezas (repito que puedes usar la mermelada que quieras; cantidad total 5 cucharadas).
La harina se mezcla con el cacao, la sal y la levadura. Mezclar bien hasta obtener una mezcla homogénea y sin grumos utilizando una batidora de varillas.
Mezclar el azúcar con el agua tibia y revolver hasta que se disuelva. Agrega el aceite, el café y el jugo de limón. Mezclar bien. Los ingredientes líquidos se van añadiendo poco a poco a los secos, mezclando con cuidado hasta obtener una mezcla suave y homogénea. Vierte la mermelada y las nueces con los frutos secos. Se mezcla muy bien.
Se cubre un molde rectangular con papel de horno, se engrasa ligeramente y se vierte la mezcla en su interior. La masa magra se hornea en un horno calentado a 180 grados hasta que se seque una barra.