Bizcocho de galleta con mascarpone y arándanos

¿Qué tan delicioso puede ser un pastel de galletas? Increíblemente delicioso. Si lo preparas según esta receta te garantizo que disfrutarás de un sabor increíble.

He hecho diferentes bizcochos de galleta. Desde el más sencillo con almidón preparado con agua, hasta uno con crema de mascarpone y chocolate líquido.

Pero créeme, este bizcocho de galleta y mascarpone con arándanos te dará un vuelco en tu idea de este tipo de postres.

Por supuesto, si no tienes mermelada de arándanos, también puedes prepararla con otras mermeladas de frutas pequeñas, pero los arándanos siguen siendo los más sabrosos para mí.

Y adivinen a quién le estoy nuevamente muy agradecido por esta receta. En Animado por supuesto.

A Pepi, esta increíble enciclopedia culinaria. Pep, ¿debería volver a decirte lo mucho que te quiero y lo agradecido que estoy por tenerte en mi vida?

No, no. Este reconocimiento no tiene nada que ver con St. Enamorado. Por favor no hagas esa conexión.

A primera vista, el pastel no es lo más bonito, pero ¿a quién le importa cuando es tan delicioso? Desde que Pepi lo mostró lo he preparado cinco o seis veces, incluso para el cumpleaños de mi hija el pedido fue este.

Voy a escribir la receta, especificando las cantidades que me vienen perfectas para llenar el molde con el que he decidido hacer este bizcocho de galleta. De lo contrario, me queda mucha crema, que por supuesto nadie se opone a destruir en casa.

Y así la receta.

Productos:

1 paquete grande y 1 pequeño de galletas Regalo Petit Beurre de Trigo
Tenga en cuenta que las galletas de desayuno NO son adecuadas para esta receta.

1 paquete de pudín de vainilla (yo uso Dr.Oetker)
500 ml de leche fresca
10 cucharadas azúcar
2 yemas de huevo
250 g de mascarpone
200 gramos de crema agria
2 vainillas


mermelada de arándanos u otras frutas pequeñas
un poco más de leche para remojar las galletas

1. Primero se prepara el pudín y, como debe estar completamente frío, puedes hacerlo con mucha antelación.

Hervir 400 ml de leche con el azúcar. Mezclar el pudín con el resto de la leche y las yemas de huevo y mezclar bien. Después de que la leche hierva, se retira la olla del fuego y la mezcla anterior se agrega lentamente a la leche mientras se revuelve continuamente.
Regresar al fuego, revolviendo constantemente, hasta que vuelva a hervir y la mezcla espese.

Dejar enfriar por completo.

2. Se mezcla la mermelada de arándanos (yo suelo poner medio frasco) con una cuchara – dos o tres de alcohol aromático o agua hasta que quede ligeramente líquida.

3. A continuación, mezcle el mascarpone, la crema agria y la vainilla, asegurándose de mezclar con un tenedor o un alambre y en ningún caso con batidora.

4. Agrega cuchara a cuchara al pudín enfriado y mezcla todo bien hasta obtener una mezcla perfectamente suave. ¡Sin usar batidora!

Se coloca una fina capa de crema en el fondo de la bandeja (de 20 por 30 cm de tamaño). Encima se colocan las galletas bañadas en leche fresca durante unos segundos. Luego sigue otra capa de nata y una capa de bizcochos. Se añade nata y aquí queda el lugar para la primera capa de mermelada. Pon la mitad en una capa fina.

Se continúa con dos hileras más de bizcochos, entre las que hay nata, y finalmente se vierte con el resto de la nata y la otra mitad de los arándanos.

Ahora llega el momento más desagradable de toda la historia. la espera. Pues sí, lamentablemente tiene que esperar. No es que no puedas comer el pastel a las cuatro, pero no quedará tan rico como el helado a las 12 o más.
Ponlo en el frigorífico y olvídate. Si es posible, escóndela para que hombres y niños no la vean.

Eso es todo. Creo que llevo más tiempo escribiendo que escribiendo…

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