Aún no es temporada de calabacines, pero esta crema de calabacines es tan deliciosa que puedes prepararla en cualquier momento. Y los calabacines llevan mucho tiempo disponibles en el mercado durante todo el año y no es difícil encontrarlos. La crema de calabacín es sumamente fresca y agradable, muy ligera y acaricia el paladar. Puedes comerlo tanto tibio como frío. Ha sido probado y resulta muy sabroso, incluso frío. Y da igual que sea sólo principios de marzo, puedes tenerlo en cuenta para una sopa fría de verano.
Además, la sopa es muy fácil de hacer y cualquiera que sepa cortar con un cuchillo y utilizar una batidora debería poder manejarla.
Para hacer una deliciosa sopa crema de calabacín, necesitas los siguientes productos:
800 g de calabacín
350 gramos de patatas
1 zanahoria grande
1 cucharadita ajo en polvo o 2-3 dientes de ajo
100 g de queso crema
100 g de nata líquida láctea
50 g de queso azul
50 g de parmesano rallado o grana padano
50 g de mantequilla de vaca
pimienta negra
eneldo fresco
2-3-4 o más cucharadas de jugo de limón recién exprimido (al gusto)
Los calabacines, las patatas y las zanahorias se cortan en trozos más grandes. Se vierten con 1,5 litros de agua tibia y se ponen a hervir con un poco de sal. Al final de la cocción, agregue el ajo finamente picado. Una vez que las verduras estén bien cocidas, se les agrega queso crema, queso azul, mantequilla y nata.
Déjalo enfriar diez minutos, agrega el eneldo y haz el puré. Sazone con pimienta negra y jugo de limón al gusto y espolvoree con queso parmesano rallado si lo desea.
*Nota: Agregar queso azul y parmesano a la sopa es opcional y para un sabor más rico, son opcionales. Sin embargo, puedes agregar otro tipo de queso derretido si lo deseas.
¡FELIZ ABUELA MARTHA A TODOS LOS LECTORES DEL BLOG!
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