¿Recuerdas las Mecas del vecino? ¿Y qué tan exitosos son? Hoy os presento otra receta de la vecina, pero esta vez de tarta. Hace un tiempo, cuando probé su pastel, me dije que debía intentar hacerlo. Bueno, ha llegado el momento. Me gustan esas tostadas y hamburguesas crujientes, espero que, aunque no sea muy tradicional, ¡la receta también te guste!
Productos:
Para la masa:
300 ml de agua tibia
1 cucharadita sal
2 cucharadas aceite
unos 700 g de harina, incluso para enrollar
para el relleno
400 gramos de queso
4 huevos
aceite (usé aproximadamente 1 cucharadita en total)
La masa se amasa a partir de los productos enumerados. No debe quedar pegajoso y debe quedar muy suave. Agrega la harina poco a poco hasta obtener una masa medianamente firme. Se divide en seis partes, que se forman en bolas. Espolvorear con harina. Se tritura el queso y se mezcla con los huevos batidos. Espolvorea harina sobre la superficie que vas a moler. Se coloca encima el pan y se enrolla con más harina, con cuidado de que no se pegue. Se corta una fina corteza rectangular. Si no resulta exactamente rectangular, se pueden cortar los extremos. Se unta toda la piel con aceite con un cepillo. Extender el relleno encima. Enrolla el lado más estrecho y coloca el rollo en una bandeja rectangular forrada con papel de horno. Las demás costras se hacen de la misma forma. Se colocan en la bandeja dejando una pequeña distancia entre ellos. No deberían permanecer juntos. Se hornean en horno precalentado a 180* Cuando estén ligeramente cocidos se sacan del horno y se untan con aceite. Se vuelven a sacar y se vuelven a sacar cuando hayan empezado a ponerse rosados. Se vuelven a untar con un poco de aceite – con una brocha y se vuelven a terminar de hornear. Sacar sobre papel y envolver con una toalla, dejar reposar unos 15 minutos antes de consumir.
