Encima también es con agua, porque resultó que se acabó la leche. Pero los huevos estaban mezclados con la harina, la sartén se calentaba en el horno y no tenía ganas de esperar a que llegara la leche… Así que decidí probar con agua, como suelo hacer con las tortitas normales. Resultó que se lo comió en segundos, no tengo quejas.
Productos:
2 huevos
1 cucharadita harina
200 ml de agua fría (según la receta eran 300 ml de leche fresca)
1 cucharadita azúcar
1 pizca de sal
1 cucharadita rasa de bicarbonato de sodio
vainilla
Engrasar con aceite un molde rectangular en el que se horneará bien la tortita y calentarlo en el horno caliente (200*). Se baten los huevos con un alambre y se les añade harina, sal y azúcar. Se agita hasta obtener una pasta espesa y homogénea. Agrega el agua/leche poco a poco y mezcla muy bien hasta que la mezcla la absorba por completo. Agregue refresco y vainilla, mezcle nuevamente. Se saca del horno la sartén caliente (en mi caso, de 34/22 cm de tamaño) y se vierte en ella la mezcla así preparada. Se regresa al horno, se reduce la temperatura a 170* y se hornea el panqueque hasta que esté cocido.
En nuestro país les gusta con chocolate líquido, puedes comerlo con el relleno que quieras.
Eso es todo, muy fácil y muy rápido.