Pechuga de cerdo asada. Nada nuevo bajo el sol. Ya tengo dos sugerencias en el blog, pero también escribiré esta receta. Aquí las pechugas tienen piel y son muy sabrosas. No es que sean menos deliciosos sin piel, pero es diferente. j Por supuesto, puedes aplicar esta receta de panceta de cerdo asada a las sin piel, e incluso a otro corte de carne.
La preparación es sencilla, y lo importante aquí es que la carne se sazone en el frigorífico durante al menos dos horas, para que absorba bien la sal y las especias y se condimente de manera uniforme.
1 trozo de pechuga de cerdo con o sin piel (unos 700g)
2 cucharadas salsa de granada
2 cucharadas Azúcar moreno (puedes sustituirlo por blanco si no tienes moreno)
1 cucharadita pimiento rojo
si te gusta picante, agrega pimienta de cayena al gusto
pimienta negra
80 ml de vino tinto
La carne se sala y se unta con aceite de oliva, salsa de soja, salsa de granada, azúcar y especias. Dejar en el frigorífico al menos dos horas, preferiblemente la noche anterior. Luego se coloca en una bandeja para horno. Vierta el vino y el agua. Cubrir con papel aluminio y hornear durante unas dos horas o hasta que esté cocido. Al final de la cocción, se retira el papel de aluminio y se devuelve la carne al horno para hornear un poco más. Tenga cuidado de no conservarlo por mucho tiempo, ya que la piel puede cocinarse demasiado y no ser comestible.