Así es. Debe haber otros como yo.
A la receta: cambié aquí y allá según las cosas que tenía, pero la base se conserva. Ahora escribiré a mi manera, y la de Pepi está aquí.
Productos:
medio pollo en trozos
30 ml de aceite
200 g de champiñones porcini
dos puñados de champiñones secos. (si está disponible)
1 cebolla
1 cabeza de ajo + 2 dientes
1 zanahoria
2 pimientos asados
un manojo pequeño de perejil
200 ml de vino blanco
1 lata de tomates
2 cucharadas puré de tomate
1 cucharadita azúcar
una salchicha de herradura para asar (pero no del todo fresca),
pimienta negra, sal.
La carne se lava y se seca bien con una toalla suave o papel de cocina, se espolvorea con sal y pimienta, que se frotan en la carne con las manos. Se dejan “envejecer” durante 20-30 minutos y se fríen en la grasa, primero con la piel hacia abajo y luego por el otro lado. Se retira la carne y se cuecen en la misma grasa la cebolla, la zanahoria y el ajo, y al cabo de 3-4 minutos las setas y el perejil. Agrega el puré de tomate, el vino, los pimientos asados picados y los tomates enlatados. Se deja hervir todo durante 15-20 minutos, hasta que la cantidad quede a la mitad. Se parten los champiñones secos (a menos que estén completamente rotos) y se ponen en remojo durante 10 minutos en un poco de agua tibia; se sacan y se añaden a la salsa junto con su líquido colado (para que no quede ningún grano de arena). Sal al gusto si los tomates no están salados y añade una cucharada de azúcar. La salsa terminada se vierte sobre la carne y se coloca la salchicha cortada en trozos. Y aquí se añaden a la salsa los 2 dientes de ajo separados, machacados o prensados. Es muy importante que la salsa no quede encima del vino de la carne, para que no quede tan cocida. Lo mejor es que tenga 2/3 de su altura.
Cubre la bandeja con papel aluminio y hornea durante aproximadamente una hora y media a 180*