Me encantan las tartas de queso. No, los adoro, pero como lo recuerdo desde pequeño. Lamentablemente ya no los venden en ningún lado. Probé algunos hace mucho tiempo y no salieron bien. Hace un tiempo usé la receta de Labreux, pero la masa era con levadura en polvo. Quedaron muy bonitos, pero aún no son lo que estaba buscando. No estaba pensando en hacer nada hoy, pero de repente me di cuenta de que debía intentarlo. Improvisé pero quedaron geniales. Si a mi hija, que no suele probar este tipo de comidas, le gustaron, a mí me ha ido bien 🙂
Productos:
1/2 cubo de levadura fresca
300 ml de leche fresca tibia
2 huevos
1 cucharadita azúcar
1 cucharadita sal
unos 500 g de harina
un huevo
pan rallado
La levadura se disuelve en la leche con el azúcar. Hacer un hueco en la harina y añadir la sal y los huevos ligeramente batidos. Vierte la leche y amasa la masa. Déjalo crecer. Está dividido en seis partes. Cada parte se enrolla formando un rectángulo y se le coloca queso. Se enrolla en un rollo apretado y se adelgaza y se alarga ligeramente con las manos. Corta las hamburguesas con un cuchillo afilado. Los hago todos y luego me pongo a freír. Así tienen tiempo de subir un poco y a mí también me resulta más fácil. Luego se bañan en huevo batido y se rebozan en pan rallado. Aquí nuevamente diré que es más fácil prepararlos todos y luego freírlos porque se queman bastante rápido. Y eso es todo. Freír en aceite caliente hasta que estén dorados por todos lados.