¡Bollos calientes, esponjosos y fragantes! Huele a panadería por todas partes 🙂
Nos encantan para el desayuno, como acompañantes del café en cualquier momento, de postre, para la cena y como refrigerio nocturno. 
Los bollos de mermelada son nuestros favoritos y tengo varias recetas para ellos en el blog, además de algunas otras. Pero tengo que decirte que estos bollos de crema son una competencia absolutamente digna.
De la masa que preparé, preparé dos tipos. No envolví uno de ellos, como es habitual, sino que puse la nata en una hendidura de la masa y en ella un higo de este año y mermelada. Ambos tipos quedaron muy lindos, noooo… si supieras lo ricos que quedaron los de higo… Mmm, ¡maravilloso! Pues bien, en casa no a todo el mundo le gusta la mermelada de higos, por eso existen dos tipos de bollos para distintos gustos.
Productos:
300 ml de leche fresca
80ml de agua
30 g de levadura fresca
8 cucharadas aceite
1 huevo + 2 claras
1/2 cucharadita azúcar
1 vaina de vainilla
una pizca de sal
unos 800 g de harina
1 yema de huevo para untar
Para la crema:
1 pudín de vainilla Bourbon premium Dr Oetker
400 leche fresca
1 yema de huevo
5 cucharadas azúcar
La preparación de los bollos de natillas comienza con la elaboración de las natillas. Para ello, el contenido del paquete se mezcla con azúcar, 4-5 cucharadas. de la leche fría y la yema. Hervir el resto de la leche. Luego se retira del fuego y se le añade la mezcla anterior. Regrese al fuego y revuelva hasta que vuelva a hervir y espese. Luego déjelo enfriar.
La masa está preparada.
La leche se mezcla con agua y se calienta un poco. Agrega 1 cucharada. del azúcar y la levadura y mezclar bien. Ponga 4-5 cucharadas. harina y mezclar nuevamente. Se deja burbujear hasta que coja un bonito “sombrero”. Hacer un hueco en la harina y añadir todos los productos, echando la levadura. Amasar una masa suave y no pegajosa. Está dividido en 20 partes, a las que se les da forma de bolas. Cubrir con un paño limpio y dejar reposar.
Luego, para formar los bollos de la primera foto, se toma una bola y se enrolla hasta formar algo parecido a un rectángulo o más bien una elipse de unos 20 cm de largo y unos 12 cm de ancho. Se coloca una tira de crema en la parte superior. borde – aproximadamente 1 1/2 .l., de modo que quede aproximadamente a 1 cm del final de la masa. La masa se dobla sobre la nata y se pega presionando con los dedos, como se muestra en la imagen. La parte restante se corta en tiras de aproximadamente 1 cm de grosor y se enrolla en un rollo.
Luego se forma un círculo y se unen los dos extremos con cuidado, teniendo cuidado de no romper la forma. Se disponen los bollos en una bandeja forrada con papel de horno y se untan batidos con 2-3 gotas de aceite y 1 cdta. yema de leche fresca. Se dejan reposar y se hornean en un horno calentado a 170 grados hasta que estén tiernos y hasta que adquieran un agradable bronceado.
Sácalas del horno, déjalas enfriar un poco y espolvoréalas generosamente con azúcar glass.
Para preparar los bollos en la segunda foto, debes hacer una hendidura en la bola de masa levantada, formando un borde con la masa. Unte la tabla con la yema batida y espolvoree con azúcar y ponga aproximadamente 1 cucharada. de la crema. Luego ponga 1 higo de mermelada en el medio y rocíe un poco del almíbar de mermelada sobre la crema. Se hornean de la misma forma hasta obtener un bonito bronceado. Una vez retirados se pueden untar con almíbar de mermelada de higos diluido con muy poca agua. ¡Quedan increíbles!
