Seguramente muchos de vosotros recordáis la repostería Negresa de antaño. Ha estado en mi viejo recetario durante mucho tiempo, pero ahora es el momento de hacerlo. Si por una razón u otra estás posponiendo hacerlo, no te preocupes. 🙂
De hecho, probablemente tengas productos para ello en los armarios y en el frigorífico, por lo que no requiere mucha preparación. Sólo la preparación del crocan puede que te parezca más poco apetecible, pero ¿y qué? Derrites el azúcar, echas nueces dentro y viertes sobre papel de aluminio para que se enfríe. Nada complicado. Ah, sí. Y déjame darte un consejo basado en la experiencia. ¡Ja ja! No intentes hervir caramelo. Su paladar y lengua sufrirán gravemente. Ahora me río mucho de este incidente, pero hace un tiempo no fue nada gracioso cuando, por costumbre, probé el caramelo caliente de la cuchara.
Productos:
*Yo uso una taza de té de 200ml.
Para pantanos:
400 gramos de yogur
1/2 cucharadita de aceite
1 cucharadita de azúcar
2 cucharaditas de harina
1 cucharada igual de bicarbonato de sodio
3 cucharadas iguales de cacao
1 cucharadita canela (me lo salté esta vez porque había alguien en la empresa a quien no le gusta 🙂 )
2 vainillas
Para el almíbar:
1/2 cucharadita azúcar
1 cucharadita agua
Para la crema:
125 g de mantequilla de vaca – a temperatura ambiente, blanda
1 cucharadita azúcar en polvo
1 yema de huevo
1 vainilla
Para el crocán:
1 cucharadita azúcar
1/2 cucharadita nueces
El yogur se mezcla con aceite y azúcar. Se mezclan bien. Agrega la harina, el cacao, la soda y la vainilla, mezclando con cuidado después de cada adición.
Se forra una forma redonda de 26 cm de diámetro con papel de horno o se engrasa y enharina y se vierte la mezcla en ella. El pan se hornea en un horno calentado a 180 grados hasta que esté cocido. Ya sabes, intenta con un palo. Si sale seco, está listo. Si empieza a tostarse por encima, cúbrelo con papel y continúa horneando. Deje que el pastel terminado se enfríe bien.
Mientras se hornea el malvavisco, prepara el almíbar. También se debe enfriar antes de verterlo.
Mezclar el azúcar y el agua y llevar a ebullición. Hervir hasta que el azúcar se derrita. Retirar y dejar enfriar.
Luego se prepara la crocana. Se derrite el azúcar y se le añaden las nueces picadas. Revuelva rápidamente y vierta sobre una hoja de papel de aluminio o papel de hornear. Déjalo reposar. Luego se desmorona. A mí me resulta más fácil con un mazo de madera para carne. Y una vez, por falta de uno de madera, por no estar en casa, usé… un martillo común y corriente. 🙂
Y por último la nata. Batir la mantequilla con el azúcar glass, la yema de huevo y la vainilla hasta obtener una crema esponjosa.
El sladkish Negresa se prepara como el bizcocho ya preparado y enfriado y se vierte con el almíbar frío. Espera a que se absorba y unta con la crema de mantequilla. Espolvorear con la crocana.
Antes de su consumo es bueno esperar al menos 5 horas, y preferiblemente 1 noche.
Eso es todo.
¡Disfrútala!
